La distancia, tanto como medida de tiempo como de lugar, es el eje central de A Lover Was Born, la más reciente obra de Kelly Finnigan. Con una mezcla impecable de intensidad y elegancia, este álbum transforma la pasión en virtud. Reconocido como el líder de The Monophonics, Finnigan profundiza en las mejores tradiciones del soul del Medio Oeste, evocando la esencia de sellos históricos como King, Curtom, Dakar y Bodie Recording Company.
Un alma atemporal
A Lover Was Born no es simplemente un homenaje a los grooves profundos de antaño; es un testimonio de que estas vibraciones no están confinadas a la nostalgia. En lugar de ello, Finnigan las coloca en el corazón ardiente del anhelo y la esperanza. Las once canciones que componen este álbum reflejan un estado de movimiento y crecimiento desde su debut como solista, The Tales People Tell (2019).
Un periodo prolífico
Entre estos dos discos, Finnigan ha atravesado una etapa de extraordinaria creatividad. Ha lanzado dos álbumes con The Monophonics, un disco navideño, un mixtape y se ha dedicado a producir para otros artistas como The Ironsides, Alanna Royale y The Sextones. Este ritmo imparable evidencia su pasión por la música, algo que él mismo define como su propósito:
“No hay nada como hacer discos”, dice Finnigan. “Siento que esa es mi razón de estar en este mundo”.
El alma en evolución
En A Lover Was Born, Finnigan reinventa el ADN del hip hop, aquel extraído por crate diggers como J Dilla y RZA, para crear algo completamente nuevo. Su música resalta tanto la amplitud como la profundidad del soul, mientras reafirma la intemporalidad de su sonido.
Un viaje emocional
Este álbum no solo es una colección de canciones; es una experiencia que transporta al oyente por un viaje cargado de emociones, texturas y mensajes universales. Finnigan demuestra que el soul no solo vive en el pasado, sino que está en constante evolución, adaptándose y resonando con las sensibilidades modernas.
Con A Lover Was Born, Kelly Finnigan nos recuerda que la música es un lenguaje eterno que puede unir épocas, géneros y emociones. Este disco no solo merece ser escuchado, sino también sentido, como un testimonio de lo que significa vivir con pasión y propósito.